Instrucción de un padre a su hijo acerca del Árbol Solar

La presente Instrucción , concebida como un discurso que un padre hace a su heredero filosófico, se fundamenta en una concepción agrícola de la Alquimia: todo el proceso alquímico, desde sus primeros pasos hasta su realización última, es semejante al trabajo rústico;  el artista, según este anónimo autor, precisará de una tierra preparada, una agua adecuada y una semilla solar, lo demás lo hace la naturaleza. Leyendo este hermoso texto comprenderá el lector porqué la Alquimia ha sido llamada, en ocasiones, Agricultura Celeste.